“Necesitamos un instrumento que permita saber el valor social que crean o destruyen las empresas”

Publicado el por N.B. / SPRI (autor)

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Entrevista a José Luis Retolaza, presidente de GEAccounting.

El proyecto GEAccounting nació a raíz de la colaboración entre Lantegi Batuak y el grupo de investigación ECRI de la UPV/EHU, respondiendo a la necesidad de monetizar el impacto que generan las organizaciones y empresas a nivel social. Junto a la Universidad de Deusto, han desarrollado un modelo para contabilizar el valor social, que han empezado a aplicar en entidades, administraciones públicas y empresas. En el caso de Lantegi Batuak, por ejemplo, ha permitido contabilizar en 90 millones de euros anuales el valor que la organización genera en la sociedad. Recientemente el Museo Minero también realizó  esta contabilidad, concluyendo que el espacio tiene un valor de 6’6 millones de euros desde una perspectiva social.

 

¿En qué consiste la monetización del valor social?

Nuestra premisa es que los indicadores económico-financieros de las organizaciones no recogen la totalidad del valor que generan o destruyen. Nos encontramos con empresas que tienen buenos resultados financieros, y sin embargo destruyen empleo, pagan unos impuestos que parecen ridículos en relación con el tamaño de su actividad o tienen un impacto negativo visible en el medio ambiente. Entonces, si no hay una concordancia entre los resultados financieros de una empresa y el valor social que genera, debemos dotarnos de algún instrumento que nos permita tener una visión más amplia del valor que crea o destruye una organización.

 

¿Para qué es importante tener esas cifras?

Es interesante conocer realmente qué valor aporta una organización porque la ciudadanía y las administraciones públicas pueden actuar en consecuencia, podemos estar interesados en adquirir un producto que genera un mayor valor social, y eso supone un empoderamiento ciudadano como consumidores. Pero también es interesante para las propias organizaciones, porque muchas veces no son conscientes de ese valor y tener una buena medición les permite gestionarlo.

 

¿Qué aspectos contabiliza que habitualmente no se tienen en cuenta?

Muchos de estos valores sí se contabilizan, pero no desde una perspectiva social. Por ejemplo, el salario de los trabajadores sí se tiene en cuenta en contabilidad, pero suele ser un coste, sin embargo como valor social es uno de los grandes beneficios que aportan las empresas. El modelo lo que hace es ver el impacto de ese puesto de trabajo en cuanto a capacidad adquisitiva, retorno en forma de impuestos, pagos a la seguridad social, etcétera. La cuantificación de variables de valor social no es algo nuevo, se lleva haciendo al menos desde hace 30 años, lo novedoso es la integración sistemática de estos valores en la contabilidad de la organización.

 

¿Las empresas también muestran interés por contabilizar su valor social?

Sí, en el País Vasco, Euskaltel ha hecho ese proceso y lo va a incorporar a sus procesos habituales de contabilidad, también hemos trabajado con empresas industriales como Domusa en Gipuzkoa, y en Navarra vamos a empezar con cooperativas agrícolas. La sensación es que es un tema que interesa no solo a las administraciones públicas y a la economía social, también a las empresas. Curiosamente, quienes están explicando su experiencia en congresos y jornadas son los directores financieros de las compañías. Aunque es un proceso para valorar lo social, el ámbito financiero ha entendido su importancia y lo está co-liderando.