España se recupera de la crisis y camina en dirección a un crecimiento progresivo, apoyado por las mejoras económicas y sociales. Después de unos años de incertidumbre, el dinamismo se instala de nuevo en el sector inmobiliario y confirma una tendencia muy positiva que se mantendrá en los próximos meses.

BIP Investment Properties, empresa de inversores inmobiliarios con sede en Barcelona, recomienda aprovechar ahora este escenario para conseguir oportunidades reales con rentabilidad a corto plazo. Así, destaca que los activos inmobiliarios comprados hace unos años, han tenido un incremento en el valor anual de entre el 20-30%. Este es uno de los principales motivos para invertir pero hay más.

La demanda por propiedades en España crece y el mercado de compraventa se vuelve más atractivo y rentable. La compañía señala que el precio de la vivienda también ha subido gradualmente desde la recesión que el país experimentó a finales de 2006. Actualmente, la rentabilidad media de este tipo de activo es del 3.6%.

Una de las propuestas de BIP es apostar por las zonas centrales y de gran flujo turístico. España es una de las principales destinaciones de Europa y el número de visitantes aumenta cada año. La economía colaborativa influencia directamente el comportamiento del turista y las viviendas ganan preferencia en relación a hoteles y hostales, pues los viajeros de negocio eligen los apartamentos turísticos. Por ello, la revaloración y revitalización de determinadas zonas hace que la demanda inmobiliaria suba y los precios de los alquileres también. En este caso, la rentabilidad bruta anual es de 9.1%, siendo de las mejores tasas registradas desde 2017.Las ciudades con más atractivos para la inversión inmobiliaria son Madrid y Barcelona, por la infraestructura de servicios que ofrecen.

Cabe destacar el ROI (Return of Investment) de España, uno de los mejores de Europa. Según la empresa especializada en el desarrollo de activos inmobiliarios, pocos países se igualan en lo que se refiere al rendimiento de los alquileres, la creciente demanda turística y las facilidades de compra de inmuebles.

El valor añadido de España
Ser la 13ª economía mundial, además del 11º país en Inversión Extranjera Directa (IED), también favorece el incremento de las inversiones en activos inmobiliarios. Además, la calidad de vida convence, convirtiendo el país en uno de los mejores del mundo para vivir. No menos importante es la red de infraestructuras, que forma un tejido favorable para el desarrollo del comercio y del turismo dentro y fuera de las fronteras.

Así, el rendimiento de los activos inmobiliarios es el resultado de la combinación de diferentes factores. El estudio de todos ellos concluye que la inversión inmobiliaria en España es rentable, segura, estable y, además, con previsión de crecimiento durante los próximos años.