Quínoa o la reina de los superalimentos. Esta semilla, cuyos orígenes se remontan a los incas, forma parte de la familia de las quenopodiáceas —como la remolacha o las espinacas—, destaca por su gran aporte de proteínas, vitaminas y minerales —sobre todo en hierro—. Pero hay más. La quínoa contiene carbohidratos de absorción lenta; es decir, se asimilan más despacio y hacen posible mantener unos niveles de azúcar en la sangre mucho más estables a diferencia de los hidratos de carbono de absorción rápida. A todo esto sumamos el aporte de fósforo, calcio, magnesio, potasio y vitaminas C, E, B1, B2, B3. “En Pambao tuvimos claro desde el principio del proceso de creación de la carta que este superalimento tenía que estar presente de alguna manera. Lo hemos añadido a nuestra escalivada para que aporte un toque crujiente. Con esto ofrecemos un plato redondo, sano y equilibrado; también queríamos que estuviera presente al no tener gluten”, explica Bárbara Buenache, chef ejecutiva de Pambao.

 

 

El cefalópodo ‘sin’ calorías. Durante mucho tiempo el pulpo se asoció erróneamente a un alimento con un gran aporte calórico. Nada más lejos de la realidad. 100 gr de pulpo aportan 164 Kcal. Yodo, calcio, potasio son solo algunos de los nutrientes que encontramos presentes en este alimento. La alta cantidad de yodo que posee, por ejemplo, ayuda al correcto funcionamiento de las células y regula el colesterol. “Habrá quien diga que nos hemos salido de los cánones habituales al rellenar un bao —matiza la chef ejecutiva—, pero queríamos ofrecer un producto revolucionario y, además, fusionar un alimento tan nuestro como es el pulpo con esta tendencia culinaria en la que se han convertido los baos”.

 

 

Aceite de oliva para todo. “Además de estar presente en todas las elaboraciones de platos calientes que requieren algún tipo de grasa para su elaboración, en Pambao realizamos nuestros baos con aceite de oliva virgen extra junto a harinas nacionales de gran calidad”, explica Carmen Elvira, directora de Expansión de Pambao. El aceite de oliva y sus beneficios, como la reducción del riesgo de enfermedades coronarias, ayuda también a reducir excesos de colesterol malo en el organismo. Elvira añade: “Este bao excepcional, donde priman las materias de gran calidad, tiene un gramaje superior a la media: cincuenta gramos —los baos que se ofrecen en otros establecimientos rozan los treinta gramos—. Nuestra meta es ofrecer un producto de calidad y no podíamos fallar ni en su composición ni en las cantidades”.

 

 

Los beneficios de la cerveza en forma de burbuja. Esta bebida contiene una gran cantidad de vitaminas y minerales: calcio, fósforo, ácido fólico y vitamina B5. Además contiene un mix de potasio y polifenoles que contribuyen a recuperar las fuerzas tras el deporte. “En Pambao, por supuesto, la ofrecemos como bebida, pero también hemos querido que esté presente en uno de los baos; por ello concentramos todo su sabor gracias a Mahou en unos bubbles que añadimos al bao de butifarra de pavo”. Por último, hay que tener en cuenta los estudios que indican que la cerveza podría evitar la oxidación de las células y aumentar la cantidad de colesterol.

 

 

La sopa fría más popular, el gazpacho. Su mayor beneficio es su contenido en vitaminas, minerales y fibra. Este popular plato facilita el efecto vasodilatador, permitiendo controlar la presión arterial. No hay que olvidar que gracias al licopeno del tomate y la Vitamina C reducimos la acción de los radicales libres. Además es un buen aliado contra las arrugas y manchas en la piel ocasionadas por el envejecimiento. “Nuestra receta contiene unas esferificaciones de ajo; este bulbo es conocido como un gran antibiótico natural que ayuda a incrementar las defensas del organismo contra bacterias y virus”, finaliza Carmen Elvira.