Un nuevo enfoque para la innovación social europea
Publicado el por SPRI (autor)
El informe de la Comisión Europea propone situar la innovación social en el corazón de sus agendas
Europa, así como el resto del mundo, está viviendo cambios disruptivos de la mano de las tecnologías. En unas sociedades hiperconectadas, esta transformación resulta cada vez más acelerada, impactando en prácticamente todos los aspectos de nuestra vida. Pero la innovación tecnológica no necesariamente trae también beneficios al conjunto de la población. Tal y como recoge el estudio Vision and Trends of Social Innovation for Europe, la innovación social es la herramienta que puede ayudar a convertir estos cambios disruptivos en una mejora de la calidad de vida.
El estudio ha sido elaborado por la Directiva General de Investigación e Innovación de la Comisión Europea y tiene como objetivo ayudar a revisar la agenda de la innovación social para Europa. Ya en 2010, esta perspectiva de la innovación empezó a incluirse en las políticas europeas como estrategia para dar solución a retos sociales. Sin embargo, según los responsables del estudio, actualmente es necesaria una renovación del contrato social europeo, y la innovación social tiene un rol importante a jugar.
Vision and Trends of Social Innovation for Europe propone un nuevo enfoque basado en tres principios. El primero de ellos es la innovación centrada en las personas, y eso significa invertir en ofrecer las condiciones y capacidades necesarias para que todas las personas puedan formar parte de la sociedad de la innovación. El informe habla de crear una “innovation army” para el futuro de Europa donde formen parte también los sectores de población más desfavorecidos.
El segundo principio es el enfoque sistémico, habilitando las condiciones para que surjan colaboraciones entre los diferentes agentes. En este sentido, las ciudades y regiones toman importancia como grandes laboratorios para facilitar estas conexiones. El tercer elemento clave consiste en el compromiso político. Según el estudio, la innovación social no puede seguir siendo un nicho, debe situarse en el corazón de la toma de decisiones y de la agenda política europea. Finalmente, el informe recoge una serie de recomendaciones para la Comisión Europea de cara a avanzar en este nuevo enfoque.