La primera memoria de sostenibilidad de Kutxabank obtiene la máxima calificación del organismo GRI

Publicado el por Endika Ruiz De Zarate / KUTXABANK (autor)

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  • La valoración de  ‘A+’ sitúa la política de Responsabilidad Social Corporativa del Grupo entre las empresas más avanzadas del mundo.
  • Kutxabank es heredera, en esta materia, de la trayectoria pionera de las Cajas vascas, que también contaban con esta distinción.

La primera memoria de sostenibilidad de Kutxabank, correspondiente al ejercicio 2012, ha obtenido el reconocimiento ‘A+’ que otorga el organismo internacional independiente Global Reporting Initiative (GRI) a las entidades que cumplen con los requisitos más exigentes en materia de Responsabilidad Social Corporativa.

Esta calificación de ‘A+’ es la máxima valoración que concede este organismo internacional, encargado de establecer, difundir y velar por el cumplimento de las directrices de presentación de información relativa a la responsabilidad social de la empresa, sobre la base de principios como transparencia y relevancia. Más de 1.000 organizaciones de todo el mundo referencian sus memorias de sostenibilidad sobre las líneas de actuación que establece Global Reporting Initiative, con criterios reconocidos por la ONU o por la Comisión Europea.

Con la primera memoria de sostenibilidad publicada por Kutxabank, cuya información ha sido certificada por AENOR, el Grupo financiero cumple con su compromiso anual de comunicar los logros obtenidos en materia de responsabilidad social. Kutxabank es heredera de la trayectoria de vanguardia que, durante décadas, han desarrollado en este ámbito las Cajas vascas. De hecho, BBK fue la primera Caja de Ahorros de todo el Estado en publicar una memoria de sostenibilidad que, al igual que las de Kutxa y Vital, recibieron la máxima nota del organismo GRI.

En materia de Responsabilidad Social, Kutxabank también cuenta con un código de ‘Política de RSE’. Este código recoge el conjunto de compromisos que desarrolla el Grupo a través de su modelo, basado en la solvencia, el alineamiento de los procesos y la operativa con la sostenibilidad económica, sobre criterios de transparencia y con comportamientos responsables desde el punto de vista social y ambiental.